EL GAUCHO
- Etimología y Significado del Vocablo
-
Gaucho según
algunos derivaría de Huachu o Guacho (del
quichua) que significa huérfano. Por
metátesis (cambio de lugar de algún sonido
en un vocablo) guacho pasa a ser gaucho, de
igual significado.
-
Otros autores
la etimología (el origen) de gaucho se
encuentra en la voz araucana gatchu.
-
El gaucho fue
un “tipo étnico-psicològico-social. Es un
ejemplar autóctono” Luis Pintos
-
Jinete
trashumante, diestro en los trabajos
ganaderos, que en los siglos XVIII y XIX
habitaba la Argentina, el Uruguay y Río
Grande del Sur de Brasil (gaùcho). Peón
rural experimentado en las faenas ganaderas
tradicionales. En gran medida el folklore
rioplatense suele identificarse con sus
costumbres.” Diccionario Enciclopédico
Planeta
-
El vocablo
continúa vigente aplicado a capataces y sus
equipos en las estancias. Esos hombres
mantienen las tradiciones a través de la
evolución de la estancia, y su valor y vigor
en las tareas ganaderas son las mismas.
-
Dicese de la
persona que reúne las cualidades de nobleza,
valentía y generosidad atribuidas al gaucho.
Gauchada Servicio o favor ocasional prestado
con buena voluntad. Enciclopedia
Características
del Gaucho:
Se destaca por su
destreza física, su altivez, su carácter
reservado, su habilidad como jinete y en el
manejo de la hacienda. El caballo constituyó su
compañero y su única riqueza. Lo domaba,
formaba y adaptaba a las tareas de la ganadería
ya que casi todas las faenas se realizaban a
caballo en la estancia primitiva.
El campo en su
concepto, estaba para pisarlo y transitarlo sin
impedimentos.
Amante de la
libertad, no se ataba a nadie; hoy trabajaba en
una estancia y mañana en otra. Su carta de
recomendación era su habilidad y su competencia.
Fue pues, el hombre
de nuestro campo; la inmensa llanura o pampa
constituyó el escenario de su vida, y cuando la
patria naciente lo llamó a la lucha, amante de
la libertad como era, luchó en todos los campos
de batalla, y lo hizo como héroe anónimo, como
el acto más natural y consustanciado con su
persona.
La evolución de los
tiempos lo asimiló a la población sedentaria y
constituyó un valioso sedimento de nuestra
formación étnica.
Fuente: Pedro V.
Capdevila
Aún hoy, y solo en
nuestro país se usa la palabra gauchada, acción
gaucha, sinónimo de noble y gentil, de ayuda y
favor hechos desinteresadamente, sin ninguna
especulación de retribución material, en el
sentido más humano de la expresión. Hágame la
gauchada o présteme su ayuda, hágame el favor,
que nos decimos en Argentina, tiene que ver con
nobleza de corazón, con desinterés, con altura
moral.
Éste es el
significado verdadero y popular argentino del
vocablo gaucho.
“ Los primeros
gauchos aparecen en escena en 1806, cuando la
primera invasión inglesa...
Viene la
Reconquista y con ella aparecen centenares de
jinetes armados del lazo y las boleadoras. He
oído narrar a personas que se cubrieron de
gloria en esta jornada, que el gaucho se lanzaba
en lo más crudo de la pelea, las balas no le
arredaban; ... y los ingleses caían atontados
bajo el yugo de esa arma desconocida.
Cuando se organizó
el Ejército libertador los gauchos abandonaban
sus hogares y familias para presentarse
voluntarios a derramar su sangre por la
independencia de su patria. Muchos de ellos
murieron haciendo proezas al lado de San Martín,
Bolívar, Belgrano” Ventura Lynch “La provincia
de Buenos Aires hasta la definición de la
cuestión capital de la república -1883”
“ Vestían en
aquellos tiempos una chaqueta corta, larga muy
poco más de la mitad de la espina dorsal, con
cuellos y solapas, blanca camisa, corbata o
pañuelos a guisa de ella (como si fuera
corbata), chaleco muy abierto y prendido con dos
botones casi sobre el esternón... Un pantalón
hasta la rodilla, muy parecido al de los
andaluces,... destacaba un calzoncillo de hilo o
de lienza hasta el suelo, flecado y bordado de
tablas. Usaba botas de potro con sus
correspondientes espuelas, cuchillo o navaja de
cinto, su largo poncho o manteo y no abandonaba
el rebenque, objeto indispensable para los que
están habituados a vivir sobre el caballo. Su
sombrero era muy parecido al de nuestros días,
más alto, más cónico hacia la punta y con el ala
más corta y estrecha.
Como los actuales,
gastaba recao, bolas y lazo. Algunos lucían sus
ricos aperos y la mayor parte manejaba el
alfajor (cuchillo de regulares dimensiones) con
destreza sin igual.
La música era la
música de nuestros días, corrupción entonces de
aires andaluces, que hoy está sumamente
adulterada. Cantaban la cifra, el cielo, el
fandango y el fandanguillo...
Ya el malambo
comenzaba a servir de torneo o palenque, en
donde el paisano iba a disputar su gloria como
danzante.
El mate introducido
del Paraguay, el churrasco y el cocido
constituían los principales platos de su arte
culinario.
Ya existían las
yerras, las boleadas de avestruces y el salir a
peludiar (cazar peludos).
Aquella especie de
gaucho era un gaucho cuyo tipo no volverá a
existir. Valiente, atrevido y generoso,
sacrificaba en aras de su lealtad hasta sus más
sagradas afecciones.
Este gaucho
desaparece de la escena en 1831.”
“El gaucho actual
comienza su vida en 1852. A la caída de Rosas...
En todas nuestras emergencias políticas él toma
una participación directa. Aún cuando se
encuentra entre ellos el tipo del gaucho
primitivo, ya no es tan acentuado como en la
época del Dictador (Rosas). Una inmensa
corriente de inmigración ha modificado bastante
el tipo del paisano. Hoy es vulgar encontrar
gauchos rubios... “Ventura Lynch – 1883 - En:
“ La provincia de Buenos Aires hasta la
definición de la cuestión capital de la
república ”
El gaucho, como
todo en la vida, se fue transformando.
Los campos iban
siendo ocupados por agricultores extranjeros,
que talaban los árboles; se alambraban y
cercaban; se multiplicaban los comercios en los
cruces de los caminos; las policías habían
dejado de ser tan rapaces, crueles y bárbaras;
los caudillos habían fallecido y sus campos
llenos de criminales y cuatreros, sus
protegidos, fueron limpiados. Los robos y
asesinatos de estos individuos se atribuían
intencionalmente a inocentes paisanos.
Fue entonces cuando
el gaucho se sintió atraído por la sociedad y
fue el manso y correcto mensual de las estancias
u obrero del poblado.
Dice José Hernández
(1881): “... el alambrado estaba haciendo
innecesarios los numerosos equipos de peones y
éstos se iban reduciendo en aquella época
aceleradamente....”
” Ya no hay
fronteras que ir a defender ( entonces nadie
dudaba de la capacidad del gaucho); pero hay
brazos forzados a permanecer ociosos por falta
de trabajos continuos. El remedio son las
colonias de hijos del país. Eso sería amparar a
la gente buena”
Pero las políticas
gubernamentales prefirieron favorecer a los
colonos extranjeros, los inmigrantes, a quienes
les daba tierras, semillas, implementos,
herramientas y animales de labranza y mantención
por un año, para él y su familia.
“No los miramos (a
los inmigrantes) con prevención, pues es
conocida su influencia en el progreso social.
Pero, si el país necesita la introducción del
elemento extranjero, necesita también y con
urgencia, la fundación de colonias agrícolas con
elementos nacionales.
Tierras fiscales
sobraban en 1881, y muy buenas. Pero nuestros
dirigentes políticos eran extranjerizantes y
despreciaban al nativo del país.”
Fuente: José
Hernández. Instrucción del Estanciero
En las
características el gaucho están las del
estanciero, del peón y muchos rasgos típicos de
la gente arraigada de nuestro
país.
Fuente: Pedro
Capdevila – En: La Estancia Argentina
Si
les interesa el tema muchos autores han escrito
sobre el gaucho. Entre ellos:
*
Ricardo Gúiraldes – En: “Don Segundo Sombra”.
Allí a través de
las memorias de un estanciero relata la
adaptación de cada hombre a su destino y la
capacidad de asumirlo; la lucha contra la
naturaleza; la amistad.; la soledad etc.
* Ventura Robustiano Lynch (1850-1888) - En: “
La provincia de Buenos Aires hasta la definiciòn
de la cuestiòn capital de la repùblica ” - 1883
*
Domingo Faustino Sarmiento – En: “Facundo”
*La
obra argentina traducida a casi todos los
idiomas del mundo, es aquella en la que él
mismo, el gaucho, nos dice quién es?, qué
siente?; gracias a la voz que le presta José
Hernández en “El gaucho Martín Fierro”.
En esta obra nos
revela mil aspectos que pueden vincularse con el
ámbito natural de la pampa, con el mundo
psicológico el gaucho, con sus condiciones de
vida y trabajo, con el momento histórico y la
organización social, jurídica y política que lo
envuelve; con sus reacciones ante el misterio de
lo sobrenatural y las manifestaciones de la
potestad de Dios.
Su carácter, su
vida, su realidad trágica y su conducta ante el
abuso de una sociedad de la que formaba parte “Y
sepan cuantos escuchan / De mis penas el
relato...”
En el canto II: El
gaucho feliz, que disfrutó de la pampa en 1852
en la época de Rosas. Describe el ambiente
histórico y social: donde evoca la edad de oro
del gaucho, la pampa sin alambrado ni fronteras,
vivir con absoluta libertad y mudar de pago.
El gaucho es parte
fundamental de nuestra historia.
Sorpréndenos, contanos ¿qué sabes del gaucho?
¿Que dicen tus conocidos sobre él?. Nosotros
también queremos aprender
¿Sabías que el
gaucho conocía tretas o artimañas para dominar
a su caballo?. Por ejemplo:
-
para que un
potro cabestree sin ponerlo en peligro
“sentándose”, le dobla las orejas hacia
adentro, con lo que se atonta y no ofrece
resistencia. (cabestro es la pieza de cuero,
más larga que las riendas, que va prendida a
la argolla del bozal por una presilla, con
él se sujeta el caballo al palenque o se
lleva de tiro para que siga sin resistencia
al jinete que lo conduce ),
-
Nunca enfrena
un redomón (potro que ha empezado a domarse)
en el rigor del verano o del invierno, para
evitar que se le haga baboso el contacto del
freno.
-
Cuando quiere
evitar que un animal corcovee (de saltos
encorvando el lomo, le comprime con fuerza
el tendón arriba del garrón (extremo de la
pata) con una soga.
-
Otra mordaza
sencilla consiste en introducirle una simple
soga en la boca, que anuda muy tirante sobre
la cabeza.
-
Cuida su
caballo, que ha sometido a un largo galope,
haciéndolo orinar, sino podría producirle
trastornos.
-
Cuando un
caballo de tiro se empaca o recula en lugar
de tirar el vehículo, lo corrige pegándole
sin violencia con la sotera (pequeño areador
de mango o látigo corto), en la verija o
ijar.
Fuente: Pedro V.
Capdevila “La Estancia Argentina”
¿ Nos contás otros recursos o costumbres que vos
conozcas? .