El
tirador es un cinto ancho de cuero fino y blando o de una tela
resistente. Este cinto era adornado con finos bordados en
hilos de color o tientos de cuero. Tenían varios bolsillos con
tapa amplia y cerrados con monedas.
Este cinturón se colgaba en la cintura o algo más abajo; en el
frente llevaba grandes monedas o chapas de metal, en los
extremos tenían unos ojales que servían para abrochar la
rastra.
La vestimenta del
hombre de campo, casi no tenía bolsillos, y para guardar sus
monedas, aplicaron un sistema para llevarlas sobre ellos y
evitar que le roben. Es así que perforaban, soldaban y cocían
con finos tientos sus monedas, usándolas a la vez, como
botones para cerrar los bolsillos o para abrochar el cinto en
los extremos.