Existe en la provincia de Mendoza una
laguna, que es como un engarce mágico en las alturas de las
montañas. Fue en tiempos antiquísimos el cráter de un
volcán, y por encantamiento su comba
dorada por el fuego se convirtió en una pequeña laguna
que es prodigio de belleza. De ella
se desprende como hilo de plata un pequeño
arroyuelo que bajando de la cumbre va a
unirse al Salado después de recorrer un largo trecho
entre peñascos bravíos. Los indios la llamaban" Alhué
pichitrequen lauquen" (pequeña laguna. de Dios que se
hiela).
El poético encantamiento del paisaje hace
que se justifique la leyenda que
narran los paisanos, y cohíbe al
hombre buscar una explicación racional de aquel misterio.
"Elchá Chiamal Cané" (doncella de la
túnica verde) fue entregada como prenda de paz por su
derrotado padre al viejo cacique Calilué, quien la toma por
esposa. La hermosa india acepta el
sacrificio por la ' ventura de su pueblo, y la concordia
reina' entre las dos tribus enemigas.
Sucedió entonces que al morir un cacique amigo de Calilué le
encarga .cuide de su apuesto hijo, llamado Cantipán, y lo
tenga por suyo.
Elchá y Cantipán
se enamoran desde el primer encuentro; por lealtad hacia su
padre adoptivo, el joven quiere huir de la que ama, pero
Elchá no lo deja hasta que promete la hará raptar y
escaparán juntos.
Una noche, huyen los enamorados, y
Calilué, en su desesperación, recurre a su hermana, la
cacica Ghulcán, quien vanamente ha pretendido el amor de
Cantipán. La despechada con el auxilio de la bruja
Quetrupillán, parte en persecución de los jóvenes.
Guiada por la bruja llegan a la. laguna, en una de cuyas
grutas se habían refugiado
Elchá y Cantipán; para sorprenderlos, la
perversa hermana de Calilué es transformada en lechuza, que
lleva en sus manos un ramo de lirios-rosas" engualichados"
por Quetrupillán.
Junto a la orilla los enamorados deslizan
su vida; la lechuza se acerca y arroja sus flores en el
regazo de Elchá, quien alborozada, las coloca sobre su pecho
y corre a contemplarse en las tersas aguas. Pero en cuanto
lo hace queda transformada en piedra. Lleno de asombro y
horror, Cantipán trata de volverla a la vida besándola
apasionadamente. Ante la inutilidad. de sus esfuerzos y
enloquecido de dolor se arroja a la laguna.
La cacica Ghulcán recobra la forma humana
y suplica a la bruja salve al hermoso joven, de cuyo amor no
puede desprenderse; mas como la bruja tarda en encontrar .el
sortilegio necesario, se arroja a la laguna para tratar de
rescatarlo. Preparado el ungüento
mágico, la bruja saca los cadáveres y los vuelve a la vida.
Cantipán corre a abrazar la petrificada figura de su amada;
Ghulcán, loca de celos, se interpone 'y le enrostra
su deslealtad para con Calilué, y sollozando le pide perdón,
pues la culpable de todas sus desgracias es la bruja
Quetrupillán. Esta, al verse descubierta quiere huir; recoge
el ramo de lirios-rosas y, sin desearlo, se contempla en el
agua: instantáneamente obra el sortilegio y desaparece en
las aguas con las flores engualichadas, "convertida en una
roca negra". Cantipán, estupefacto, comprende que en el ramo
lirio está el encantamiento, y para
recuperado y, volver a la vida a Elchá se arroja de nuevo a
la laguna. Ghulcán, ante el fracaso, sigue al que amó
inútilmente hacia el desconocido
fondo del cual nunca regresarán...
En las noches de luna se escucha la queja
lastimera de los enamorados, mientras con sus ojuelos
vivaces, una lechuza, donde refugióse
el alma de la bruja, ronda, presa del encantamiento...
Y así corre entre los paisanos de
la tierra de los huarpes esta tierna leyenda. Hay quienes
refieren que la laguna en noches silenciosas emite en el
cabrilleo de sus aguas,
un lamento suave y profundo. Son las
voces de Elchá y Cantipán que aun esperan alguien que los
despierte del encantamiento.,