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Página declarada de Interés Cultural por la
Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires por
Resolución Nº 374/07 del 15/11/2007
Adherida a la Federación Argentina de Instituciones
Folklóricas F.A.I.F.
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SUPERSTICIONES Y
LEYENDAS - EL CHON - CHON |
El chon
chon es un ave nocturna muy parecida al lechuzón y forma
parte de esa especie. Es de tamaño algo mayor que una paloma
y su plumaje gris jaspeado forma bandas blancas
y barrosas. Sus gritos intermitentes,
semejantes a sordas campanadas, originaron su nombre:
"chon chon", con el que se le conoce en toda la región del
Sur. Los araucanos creen que alberga el Espíritu del Demonio
y cuentan esta leyenda, que los misioneros han modificado
sin quitarle empero su raíz primitiva.
"En épocas muy lejanas
existió un "machi " poseedor de
numerosos secretos naturales. En vez
de aplicarlos en el alivio de
sus semejantes se complacía en
dañarlos, y en particular a los que gozaban
de bienestar material y espiritual.
Dicen q ue
fue tan feo como malo, y que su principal alimento lo
constituía la sal. Anticipándose a su
muerte, Huecuvú , cargó con él,
llevando su alma a sus tenebrosos
antros con el fin de convertirlo
en su aliado. Le
otorgó la facultad de transformarse .en ave nocturna para
volcar sobre la tierra sus artes de maldad. Desde aquel
tiempo, hasta la fecha, todas las desgracias ocurridas en la
cordillera fueron obra del" machi" malo; y solamente las
personas que conocen por tradición las fórmulas para
invalidar su funesta influencia, pueden evitar las
desventuras.
Cuando
el chon chon quiere causar un mal a determinada familia o
persona, aletea por encima de la casa
emitiendo sus gritos. Para ahuyentarlo se deben pronunciar
las palabras redobladas. Se consigue asimismo evitar el daño
si se le dice: "
Ven a buscar sal mañana". Al día siguiente se presentará un
indio muy viejo y feo, que tomará la
sal y se alejará silenciosamente. Como el machi puede
también dividir su personalidad entre varios ejemplares del
ave
descripta, y en esa forma ser causa
de epidemias, se recurre a un rito, ejecutado frente al
fuego para reunirlos, y luego quitar todo su poder con las
palabras redobladas. Consiste esta ceremonia en golpear
sobre los morillos y pronunciar en araucano esta oración:
"Cupán chon chon, ilen chadi" (Ven chon chon, te. daremos de
comer sal). . Al instante aparecerán aleteando sobre el
lugar numerosos pájaros: En todos los casos, antes de
pronunciar las palabras redobladas, se debe dibujar una
estrella de siete puntas en cualquier lugar interior de
la casa, que permita clavar un cuchillo en el centro
de la misma. A esa estrella se le da el nombre de "firma de
Salomón" o
"Cruz de Salomón". Acto seguido se reza
la oración, que tiene la virtud y el podé); de abatir
las aves y mantenerlas prisioneras, mientras no se retire el
cuchillo del centro de la estrella.
"
Amigo, dígame una. Amigo se la diré: una no es ninguna,
siempre la virgen pura. Amigo, dígame dos. Amigo se las
diré: dos son las tablas de la ley por donde pasó
Moisés con sus doce apóstoles a Jerusalén; una no es
ninguna, siempre la Virgen pura. Amigo, dígame tres. Amigo
se las diré: tres son las tres Marías, dos son las tablas de
la ley por donde pasó Moisés y una no
es ninguna, siempre la Virgen pura.
Amigo, dígame cuatro. Amigo, se las diré: cuatro son los
cuatro evangelistas; tres son las tres Marías, dos son las
tablas de la ley por donde pasó Moisés y una no es ninguna,
siempre la Virgen pura. Amigo, dígame cinco. Amigo se las
diré: cinco son las cinco llagas, cuatro son los cuatro
evangelistas, tres son las tres Marías, dos son las tablas
'de la ley por donde pasó Moisés y una no es ninguna,
siempre la Virgen pura. Amigo, dígame seis.
Amigo se las diré :'. seis son las seis candilejas, .cinco
son las cinco llagas, cuatro son los cuatro evangelistas,
tres son las tres Marías, dos son las tablas de la ley por
donde pasó Moisés y una no es ninguna, siempre la Virgen
pura. Amigo, dígame siete. Amigo se las diré: siete son los
siete sacramentos, seis son las seis candilejas, cinco son
las cinco llagas, cuatro son los cuatro evangelistas,
tres son las tres Marías, dos son las tablas de la ley por
donde pas6 Moisés y una no es ninguna, siempre la Virgen
pura."
Esta oracion,
redoblada, conjura el peligro del Mal y no cabe duda que los
jesuítas han tomado con exquisito tacto las "razones" que
empleaban los araucanos en sus ceremonias parlamentarias
(Hillatrún o Guillatún) donde se empleaba un juego
de palabras muy parecido, carente
desde luego de simbolismo cristiano
machi: hechicero
huecuvú: demonio
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