Telésfora
Santillán era una "inocente" que vivió a mediados del siglo
pasado en la región del Salado (Departamento Figueroa,
Santiago del Estero).
Es conocida
en toda la provincia como alma milagrosa, y se le llama en
algunos lugares, Telesita, Tele o Telesa.
Circulan
sobre su vida varias leyendas; sin embargo, todas ellas
coinciden en el relato de su trágica muerte.
Una versión
dice que la Telesita era una mujer a quien gustaba muchísimo
embriagarse y bailar; un día cayó ebria sobre el fuego y
murió quemada.
Otra presenta
a la Telesita como a una chiquilina "inocente" que vivía
mendigando y que murió quemada, mientras dormía acurrucada
al lado de un fogón, en una noche de invierno.
Finalmente
para muchos la Telesita era una mujer "inocente", que vagaba
por los bosques de Santiago del Estero y sólo se aproximaba
a los ranchos para robar algún alimento o atraída por los
sones de la caja, anunciadores de baile y diversión.
En una
oportunidad, en que entró a escondidas en la cocina de una
casa, se le incendiaron los harapos que la cubrían. Al ver
las llamas, la "inocente" huyó hacia los bosques
despavorida, y allí la encontraron luego, carbonizada.
La Telesita
es milagrosa porque "hace aparecer todo lo perdido". Si a un
arriero, por ejemplo, se le extravía un animal, le ofrece
una Telesiada (baile), convencido de que el animal
aparecerá.
Inocente
- Falta de inteligencia
Telesiada
- Baile con abundancia de caña y música. El que ha
ofrecido la promesa, lo inicia con una chacarera.