Página declarada de Interés Cultural por la
Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires por
Resolución Nº 374/07 del 15/11/2007
Adherida a la Federación Argentina de Instituciones
Folklóricas F.A.I.F.
CULTURAS
DEL NOROESTE
Diaguitas y
Calchaquíes
Se los conoció con el
nombre de CACANOS y habitaron los valles de Catamarca, La
Rioja, y Salta.
Cacanos:
fueron unos de los pueblos de mayor desarrollo económico
de la región, conocían muchas técnicas, entre ellas el
empleo de terrazas y andenes montañosos para la
agricultura.
Agricultura:
conocieron y cultivaron el maíz, el zapallo, porotos y
quinoa. Sin duda la agricultura fue un duro desafío para
los pueblos de la zona montañosa, pero esta tribu en
particular se dio maña para crear andenes en las laderas
del cerro. Al tener tan poca agua, debieron construir
canales y acequias para el riego, tan eficaces que en
algunos lugares se siguen utilizando.
Criaron llamas y
guanacos, de los que obtuvieron carne y lana lo que les
permitía alimentarse y realizar tejidos de excelente
calidad. Solían recolectar frutos, entre ellos la
algarroba, y la almacenaban en depósitos subterráneos.
Con la algarroba hacían patay y alhoja, sus
bebidas alcohólicas por excelencia.
Vivienda:
hicieron sus viviendas de piedra, dispuestas en forma de
pirca, y no
utilizaron ningun tipo de cemento; esta técnica la tenían
los pueblos andinos. Las casas no tenían ventanas y el
techo era de barro o paja. Sus construcciones fueron
monumentales, prueba de ello son localidades como La
Paya, Quilmes y Tolombón. Sus ciudades
se defendían por pucarás, que estaban situados en sitios
casi inaccesibles.
Organización
social: eran
polígamos, por lo general la cantidad de mujeres era
proporcional a los ingresos del marido... por lo general
los únicos realmente polígamos eran los caciques y los
nobles (igual que en nuestros días...).
Costumbres:
su vestimenta constaba de una camiseta que llegaba por
debajo de la rodilla y en ocasiones se lo ceñían en la
cintura para no tropezar. Usaron adornos de metales tales
como el bronce y se protegían los pies con sandalias
llamadas ojotas. Fueron enormes guerreros y
mostraron su fiereza con sus vecinos tanto como con los
españoles, para ello creaban hachas de piedra y usaron
arcos y flechas.
Arte:
trabajaron muy bien la cerámica, usaron tinajas para
beber, para almacenar líquidos o para rituales
funerarios. Existieron distintos estilos en la creación
de cerámicos: los Barreales, Belén, y
Santa María. Esta última técnica es quizá la más
linda y es la característica de tinajas con el cuello
largo y con variados motivos.... sólo se encuentra en la
zona calchaquí...
Los Quilmes:
pertenecían a los cacanos y fueron quizá los mayores
insurrectos contra los españoles, siguiendo al inca
Bohorquez. Los conquistadores, para evitar más
levantamientos, los desarraigaron y trasladaron a sitios
lejanos.
Fueron cerca de 11000 los
indígenas distribuídos en distintas regiones del país.
Los Quilmes fueron trasladados a Buenos Aires y de ellos
sólo quedó el nombre de la actual ciudad.
Capayanes
Ubicación:
se encontraban desde el límite entre La Rioja y Catamarca
hasta el río Jachal, en San Juan. Al oeste los limitaba
la cordillera de Los Andes y al este llegaron casi hasta
el límite entre las provincias de Tucumán y Catamarca.
Tenían como vecinos: al
norte a los Diaguitas y al sur a los Huarpes.
Desarrollaron depósitos semisubterráneos para almacenar
el maíz, zapallo y otros cultivos.
Vivienda:solían construir su vivienda al pie de un gran
árbol cuya copa servía de techo. Las paredes eran de
barro y adobe.
En la zona de Vinchina se
puede observar como en la actualidad los pobladores hacen
sus viviendas de forma casi similar a la de los antiguos
Capayanes. Eran expertos constructores de canales de
riego, algunos de más de 12 kilómetros de largo.
Costumbres:
trabajaron la cerámica creando tinajas, pero sin duda su
especialidad fueron las pipas de barro cuya
cazoleta tenía forma de cabeza humana.
Encontramos vestigios de
su lengua en terminaciones como bis, pis o
china por ejemplo: Yacampis, Quilmebis,
Guanchina, etc. Los Capayanes quedaron totalmente
extinguidos a fines del siglo XVIII.
Humahuacas o Omaguacas
Perfil:
ocuparon la parte norte del noroeste argentino, tenían
como autoridad a un único cacique, y el más famoso fue
Viltipoco, un valiente guerrero que hizo frente
aguerridamente a los españoles.
Algunos grupos pertenecientes a los Omaguacas fueron: los
Ocloya, Purmamarca, Fiscara y Jujuy. Fueron excepcionales
ingenieros: en Alfarcito puede verse la técnica
avanzadísima de cultivo en andenes (ver diaguitas) con
sus correspondiente sistema de irrigación.
Criaron llamas y
vistieron ropas de lana (esa zona es muy fría por las
noches y en invierno), para los pies: ojotas.
Cultivos:
al igual que el resto de los pueblos andinos, los
omaguacas basaban su economía en la agricultura, para
ello idearon geniales sistemas de andenes con irrigación
artificial. Preparaban la tierra para el cultivo con
palas hechas de madera dura o de piedra. Luego, con una
maza, rompían los terrones que quedaban. Luego de
preparada la tierra, ponían semillas de maíz, papa o
quinoa. Esta alimentación vegetariana se complementaba
con la caza del guanaco, suri (ñandú) y algunas aves. Los
productos de sus cultivos, esperaban ser comidos en
depósitos subterráneos.
Fierosguerreros:sus
viviendas eran de piedra y estaban muy bien organizadas
con sistemas de pasillos, al igual que los capayanes y
cacanos, construyeron pucarás para la defensa. Se dice
que los Omaguacas eran tan bravos que sus enemigos les
tenían pánico, ya que estos guerreros, cortaban las
cabezas de sus enemigos y las colocaban como adorno y
advertencia.
Apatamas
Ubicación:
habitaron la parte puneña de Jujuy y se relacionaron con
los Atacamas de la actual Bolivia. Trabajaban con
numeración decimal (como varios pueblos andinos) y
guardaron sus víveres en depósitos subterráneos.
Agricultura:
cultivaron maíz, papa y quinoa en la zona conocida como
oasis de regadío. Las herramientas más comunes
fueron las palas, azadones y grandes cuchillos de madera.
Economía:
criaron llamas para el traslado de mercadería. La fuente
principal de recursos económicos era la sal. El trueque
les permitió conseguir carne y fruta que no eran
abundantes en la región.
Viviendas:
sus casas eran de piedra y no se observan puertas,
esto se debe a que los Apatamas entraban a sus recintos
por el techo con escaleras de mano. Las construcciones
mayores eran con fines ceremoniales.
Vestimenta:
usaron la camiseta andina, que en épocas de frío cubrían
con poncho, tenían largas fajas para la cintura y en los
pies las ushutas u ojotas; en la cabeza usaban gorro de
lana que tapaba sus orejas y a veces vinchas, que los más
pudientes adornaban con oro, plata o plumas de colores.
Se complementaba todo esto con collares, brazaletes, etc.
Lules
- Vilelas
Ubicación:originariamente los
Lules ocuparon la zona abarcada por los Matacos, quienes
los corrieron a su conocida ubicación de la parte
noroeste de Santiago del Estero, Norte de Tucumán y sur
de Salta (que anteriormente ocupó una cultura llamada La
Candelaria).
Los Lules se dividían en Esistiné, Toquistiné, Oristiné,
Axostiné, Tamboriné, Guaxastiné y Casutiné. Los Vilelas
se subdividían en Chunupí, Pazaine, Atalala, Omoampa,
Yeconoampa, Vacaa, Chole, Ipa y Yooc o Guamalca. Los Lule-Vilela
tenían características huárpidas: esbeltos y de
apariencia agradable. Hacia fines del siglo XVII se
encontraban en el interior del Chaco.
Hábitos
alimenticios:
fueron nómades, cazadores y recolectores. Cazaron
principalmente el pecarí o chancho del monte y la
recolección favorita fue la algarroba y la miel
silvestre, esta última la obtenían haciendo un agujero en
el árbol con una cuña y por allí extraían los panales sin
precaución alguna. No trabajaron el riego, sólo debían
cavar pozos o esperar la temporada de lluvias.
Vestimenta:
debido a la zona templada que habitaban, ellos se
desplazaban prácticamente desnudos. Como vestimenta
tenían una madeja de hilo a modo de cinturón del que
colgaban por delante plumas de ñandú. Las mujeres usaban
el mismo cinturón pero en lugar de llevar plumas, se
colocaban un delantal de hilo de caraguatá. Usaron
pelo largo y sólo lo cortaban en ocasiones de duelo.
Usaron los tatuajes en ocasiones especiales.
Fiestas y
ritos: tuvieron la
presencia del yamán (chamán o shamán). Una de las tantas
formas de curar consistía en sangrar al enfermo en
la zona dolorida para sacar la mala sangre
ocasionada por un espíritu (ayacuá).
Para invocar a la lluvia el yamán aspiraba por la nariz
el polvo del cebil, y, una vez en trance, bailaba y
cantaba pidiendo, a gritos, la llegada de la lluvia.
Su celebración más importante fue la Fiesta del Diablo,
que tenía por objeto ahuyentar los males. Duraba 15 días.
En ese lapso los indígenas cantaban y bebían hasta caer
en un profundo sueño, para continuar al día siguiente con
la celebración.
Tonocotés
Origen:
fue un pueblo sedentario que habitó la región comprendida
por los llanos santiagueños y en la actual ciudad de
Santiago del Estero.
Los españoles los conocieron como Juríes. La
primera denominación de Tonocoté aparece en un documento
de 1574. Son de origen brasílido, estatura mediana, cara
ancha y nariz mediana. Con el tiempo tomaron costumbres
andinas, practicando la agricultura, se dedicaron a la
caza, pesca y recolección.
Vestimenta:
los hombres tenían un delantal corto y collar hecho con
plumas de ñandú, también mantas decoradas para cubrir el
torso. Las mujeres usaban el mismo diseño pero con tela
de llama o guanaco o fibra de caraguatá.
Armas y
vivienda: usaron el
arco de gran tamaño, tipo amazónico, flechas y macana.
Las puntas de las flechas por lo general tenían veneno.
Las viviendas se construían sobre elevaciones
artificiales del terreno (túmulos). Eran redondeadas, de
material poco duradero y el techo de paja. Alrededor de
la aldea construyeron empalizadas.
Telares y
alfarería: las mujeres
eran grandes hilanderas,pero sin duda, los Tonocotés
sobresalieron en la alfarería, hicieron grandes urnas
funerarias y pucos, con motivos muy elaborados.
Dioses:
Cacanich fue su dios supremo. Para pedir beneficios
solían ofrecer dones, sacrificios, mujeres vírgenes o
aves muertas. Su rito funerario era muy supersticioso,
primero enterraban a los muertos hasta que las partes
blandas desaparecieran. Una vez descarnado el cuerpo se
lo colocaba en urnas de barro decoradas, para, por fin,
enterrarlos debajo de las viviendas.
Yacampis
Fue un pueblo muy antiguo
que, según los expertos, habitó en la región noroeste,
más precisamente en una pequeña porción de la zona
limítrofe entre las actuales provincias de La Rioja y San
Juan (Valle Fértil). Fueron una parcialidad diaguita.
Poco es lo que se conoce
de este pueblo debido a que era muy pequeño pero los
nombramos para que sepan de su existencia.