Para
que nadie me viera,
salté el tapial de mi casa,
le puse grillos al viento
ya mi corazón, aldaba.
Como
soy cogollo tierno
para andar de chaya en chaya,
con un pañuelo de nubes
la
luna se ató la cara.
De
balde se secó un río,
de
balde corté la falda,
la
noche no me dio tiempo...
¡Ay, carnaval de Humahuaca!
Solo
por haber llegado
después de la última zamba,
la que me dijo: te espero
quiere ahora que me vaya.
¡Bastonero! ¡Bastonero!
que
me fusilen al alba,
con
un frasco de singani
y un
brique de chicha ahogada.
Para
que quiero la vida
si ya
no me queda nada...
Que me lleven cerro arriba,
que me hagan la cacharpaya.
Domingo Zerpa
Puya-Puyas
Maestro y Poeta Jujeño nacido en el año 1909.
|