PÁGINA DE INICIO

   QUIENES SOMOS

    CARTELERAS
 

   PEÑAS BAILABLES

   EVENTOS Y PEÑAS ESPECTÁCULO

   ARTISTAS

   PROFESORES - CLASES
   DESTACADOS DE PEÑAS
   VIDEOS
    TEMAS DE INTERÉS
 

  AL COLE CON EL FOLKLORE

   ARTÍCULOS RELACIONADOS

   COMIDAS CRIOLLAS

   CONOCIENDO ARGENTINA

   CONOCIENDO LOS BARRIOS

   CREENCIAS

   COSTUMBRES

   DANZAS TRADICIONALES
      Hist/Coreog

   DICCIONARIO FOLKLÓRICO

   DICCIONARIO GUARANÍ

   DICCIONARIO QUECHUA

   DICCIONARIO MAPUCHE

   EFEMÉRIDES FOLKLÓRICAS

   FÁBULAS

   FIESTAS CRIOLLAS POR PCIA.

   JINETEADA Y DOMA

   INSTRUMENTOS MUSICALES
    
AUTÓCTONOS

   LA PAYADA - LOS PAYADORES

   LITERATURA DIGITAL

   INTERÉS GENERAL

   NUESTRA BANDERA

   NUESTRO HIMNO

   PILCHAS GAUCHAS

   OBJETOS REPRESENTATIVOS

   REFRANERO

   RELACIONES

   REPRESENTANTES DEL FOLKLORE

   RITMOS FOLKLÓRICOS EN
      ARGENTINA

   SUPERSTICIONES Y LEYENDAS

   INGRESO AL FORO
      FOLKLORE TRADICIONES

   LIBRO DE VISITAS
 
   ENTRETENIMIENTOS
 

   ADIVINANZAS

   RINCÓN DE LOS ABUELOS

   GAUCHITOOO

   JUEGOS

   LINKS AMIGOS

   POSTALES ARGENTINAS

   RINCÓN POÉTICO
 
   OTROS DESTACADOS
 
   ESCUELAS DE DANZAS NATIVAS
      DONDE APRENDER A BAILAR
   CONJUNTOS Y ARTISTAS
      FOLKLÓRICOS
   DANZAS DE PROYECCIÓN
      Hist/Coreog
   LA REVISTA PEÑERA
   MUSICALIZADORES DE PEÑAS
   PROGRAMAS RADIALES Y TV
   REVISTAS FOLKLÓRICAS
   DIARIOS TRADICIONALISTAS

GRAN BUENOS AIRES - LA PLATA volver a
gran buenos aires

HISTORIA

Después del fracaso del alzamiento porteño de 1880, que obligó a la Provincia a entregar su capital histórico "su alma, su cabeza, su brazo", dirá Saldias, las autoridades surgidas de ese episodio se dispusieron a reparar la tremenda perdida, rápidamente, sin lamentaciones ni nostalgias.

Cinco años bastaron para que el fenómeno de la nueva sede bonaerense empezara a llamar la atención de la opinión mundial. Se la comparaba con Washington, nacida también después de una meditada decisión política destinada a afianzar el sistema federal.

La Plata era, sobre todo, el mejor ejemplo de la capacidad creadora de los argentinos.

Moderna en su concepción urbanística, distinta en las características de su sociedad, exenta de las tradiciones hispánicas que pesaban sobre las otras ciudades del país.

Resumía el espíritu "positivo" del siglo y el optimismo dispendioso de la década del 80. "Me voy para La Plata/ la nueva capital/ que allí se gana mucho/ con poco trabajar..." Esta copla entonada por la legión de empleados públicos y albañiles italianos que fueron sus primeros habitantes, refleja aquella ciudad prodigiosa, surgida como por encantamiento del suelo pampeano.

Después de la Capitalización

La ciudad de Buenos Aires había sido la capital del virreinato del Río de La Plata y la sede de los gobiernos patrios. Fue confirmada como cabeza de la República por la Constitución de 1853, pero los porteños rechazaron esta imposición: no querían ceder su ciudad, su aduana, sus rentas.

El punto fue uno de los temas conflictivos que provocaron la separación de la Provincia de Buenos Aires del resto de la Confederación. Después de Pavón (1860) se llegó a un compromiso: el gobierno nacional permanecería en la ciudad porteña a título de "huésped", y la Provincia de Buenos Aires sería la anfitriona.

La situación se prolongó a lo largo de las presidencias de Mitre, Sarmiento y Avellaneda. Al ser vencida la insurrección de Tejedor contra la triunfante candidatura de Roca, el nuevo presidente aprovechó para terminar con el histórico problema: el Congreso sancionó la Ley de capitalización de Buenos Aires, y la Legislatura bonaerense no tuvo otro camino que ceder el ejido de la ciudad a la Nación.

El Dr Dardo Rocha fue investido como Gobernador de la Provincia, el 1 de Mayo de 1881, y dijo en su discurso "Debemos esperar que en un breve tiempo levantemos una ciudad populosa y floreciente que, para las necesidades administrativas y políticas, reemplace en cuanto sea posible a la antiguacapital". Se formaron dos comisiones que tuvieron a su cargo la elección del lugar apropiado para levantar la nueva capital.

Finalmente, luego de rechazar varios lugares, se eligió el partido de Ensenada, cercana a la boca del Río de La Plata y conectado con Buenos Aires a través del ferrocarril. Reunía las condiciones condiciones ideales.

Eso sí, era preciso fundar una ciudad desde sus cimientos, porque el sitio no era otra cosa que montes, lomas y bañados, recorridos por liebres, perdices y vizcachas, que servían de pastoreo a las haciendas de las estancias cercanas.

Los únicos habitantes de esas extensiones eran los puesteros de Martín Iraola y los pobladores de Tolosa, una pequeña localidad de 7.000 habitantes, fundada en el año 1871.

Entre marzo y abril de 1882, la Legislatura de Buenos Aires consideró el tema de la nueva capital, que recibió entonces su nombre definitivo, La Plata. Muchas críticas y polémicas en los periódicos porteños; Sarmiento salió a la palestra vaticinando sombríos pronósticos.

Entretanto sin hacer mucho caso a estos y otros desdenes, las autoridades provinciales habían fijado fecha para la fundación.

Sería el 19 de noviembre, fiesta de San Ponciano, Patrono de la ciudad. La piedra fundamental debía colocarse en una urna que sería enterrada en el centro de lo que habría de ser, con el tiempo, la plaza principal.

Febrilmente comenzaron los preparativos de la ceremonia, que se había proyectado para que tuviera una gran majestuosidad.

Se abovedó con conchillas el trayecto entre la estación y la plaza y se cursaron las invitaciones generosamente.

Ante todo faltó el padrino, el Presidente de la Nación, Gral.Roca quien se hizo representar por el Ministro Victorino de la Plaza.

Pero lo que malogró la fiesta fue el calor: la jornada resultó tan bochornosa que el gigantesco asado se arruinó y los invitados y los visitantes de los pagos vecinos volvieron hambrientos y sofocados a sus casas. Con todo, la ceremonia siguió adelante, con carreras de sortijas y fuegos de artificio.

La estructura levantada en la plaza, que los fotógrafos recogieron para la historia estaba constituida por palcos, arcos triunfales y leyendas como "Paz y Libertad"; "Orden y Progreso"; "Vías de Comunicación y Vida Municipal"; "Educación común y sufragio libre"; "No basta odiar la tiranía, es necesario amar la libertad".Como se advierte, todo un programa ideológico, coherente con la iniciativa que empezaba a concretarse en medio de los calores de la jornada, que, de hecho, deberían haber sido previstos, dado lo avanzado del mes de noviembre.

Y así empezó la "ciudad milagro". A fines de 1884 los poderes públicos de la provincia se instalaron en La Plata.

Los edificios estaban a medio terminar y los muebles fueron ubicados como se pudo, probablemente, el apuro se debía a presiones del gobierno nacional, cuyo titular no compartía las aspiraciones presidenciales de Dardo Rocha.

Sea como fuere, los informes del Departamento de Ingenieros, los periódicos, los relatos de los viajeros y la cámara fotográfica fueron registrando semana tras semana, mes tras mes, año tras año, los espectaculares progresos de La Plata.

El Prodigio de las Pampas

La nueva capital bonaerense fue un auténtico prodigio edilicio, urbanístico y demográfico. En 1882 tenía 7.000 habitantes; para el centenario, su población ascendía a 100.000 almas.

El impulso con que había surgido la ciudad se debió a varios factores, entre ellos, la premura con que se abrieron los concursos internacionales para proyectar los edificios públicos.

El carácter monumental que se infundiría a la ciudad, la preocupación por los espacios verdes, las calles anchas, las plazas numerosas y el trazado original, susceptible de ensancharse o prolongarse como en las exigencias higiénicas del proyecto, evidenciadas en el requisito de que el diseño brindara facilidades para la limpieza diaria, la extracción de residuos y la provisión de agua.

Mientras se iba convirtiendo en realidad, La Plata cobraba dimensión y vida propia, a pesar de haber nacido sin infancia previa.

Comenzó a tener conciencia cultural y a elaborar su leyenda. Hacia fines del siglo pasado, la ciudad ya era una sólida realidad urbanística, política y económica.Tenía una sociedad propia, orgullosa de su radicación, que se jactaba de sus calles iluminadas con electricidad y de su Teatro Argentino.

Una sociedad nueva sin la carga de tradiciones anteriores que hicieran difícil su fluidez, en la que se destacaban algunos hombres que le daban lustre como Pedro B. Palacios (Almafuerte) o, años más tarde el novelista Benito Lynch.

Una comunidad que incluso podía alimentar su memoria con hechos de armas, como los que ocurrieron en 1893, cuando la revolución organizada por Hipólito Irigoyen ocupó el gobierno por unos pocos días.

Así, ennoblecido por los tilos y refrescado por el hermoso bosque el paisaje urbano de La Plata tenía características únicas en el conjunto de las ciudades argentinas.

REPUBLICA DE LOS NIÑOS -

Historia del Proyecto

Un lugar de fantasía y encanto

La mágica y encantadora República de los Niños se levantó hace medio siglo en un predio de 53 hectáreas ubicado en la localidad de Manuel B. Gonnet, sobre el camino General Belgrano, partido de La Plata, en tierras que pertenecían al antiguo campo de golf del "Swift Golf Club" destinadas a los frigoríficos ingleses asentados en la región.

La construcción, que comenzó en 1949 durante la gobernación del Cnel. Domingo Mercante, fue realizada por la empresa CAPRESA y financiada con recursos provinciales a través del Instituto Inversor de la Provincia de Buenos Aires con el objeto de poder construir el complejo en un tiempo record. En la edificación trabajaron 1600 obreros que se alojaban en las barracas dentro del mismo predio.

Luego de dos años de continuo trabajo, fue finalmente inaugurada el 26 de noviembre de 1951 por el entonces presidente de la Nación Tte. Gral. Juan Domingo Perón. A partir de ese momento, numerosos contingentes de alumnos de nuestra ciudad, con participación de escuelas de la provincia de Buenos Aires, eligen las autoridades del Gobierno Infantil y debaten en los recintos distintos temas de interés desde su mirada niña.
Considerado el mayor emprendimiento infantil de Latinoamérica y primer parque temático de América, la República de los Niños fue fundada con un doble propósito: el de esparcimiento creativo en un mundo de sueños y cuentos ligados a la infancia y el de aprender a ejercer los derechos y obligaciones que en todo país democrático poseen los ciudadanos.
Por aquellos años, Walt Disney visitó el lugar y sorprendido por tanta belleza se inspiró para construir más tarde Disneylandia, en la ciudad de California.

El paisaje de la República de los Niños presenta zonas onduladas, espacios verdes parquizados, una añosa arboleda con variedad de especies y una depresión central que por drenaje natural de las aguas conforman un lago con islas.
El predio se halla sectorizado en tres áreas: urbana, rural y deportiva. El área urbana posee senderos, calles y singulares edificios que constituyen un eje central denominado Centro Cívico donde se concentran las construcciones que albergan las instituciones del Gobierno de la República. Siendo los niños los destinatarios de este maravilloso emprendimiento, el objetivo fundacional fue construir los edificios a su escala para que puedan vivenciar el funcionamiento de las instituciones republicanas, formándose en los principios democráticos.

Castillos, palacios orientales, restaurantes, edificios públicos y hasta la misma Capilla en donde se suele oficiar misa, respetan esa ley lo mismo que sus muebles.
La reducción acorde a niños de 10 años no ha quitado encanto ni posibilidad de goce del paseo por parte de los adultos sino que, por el contrario, los obliga a retrotraerse a su infancia.

El equipo proyectista y ejecutor de las obras fue encabezado por los arquitectos Lima, Cuenca y Gallo
que tomaron como fuente de inspiración los cuentos de Andersen, los hermanos Grimm y las leyendas narradas por Tennyson y Mallory para planificar y dirigir su construcción con influencias de estilos medievales, europeos e islámicos.

El edificio del Banco Municipal Infantil situado frente a la plaza principal, Plaza San Martín, es una réplica del Palacio Ducal de Venecia; cerca de allí se levanta otra construcción, el Palacio de Cultura, inspirado en el Taj Mahal de Agra, de la India, en donde tiene su sede el Museo Internacional del Muñeco.
En la Capilla, bajo la advocación de la Virgen de Lourdes, con grandes planos de techos normandos, galerías laterales y torres con campanarios; la Casa de Gobierno con ventanas de estilo gótico coronado por un techo de imaginativas formas elevadas a manera de torres y miradores, cierran la Plaza San Martín.

En torno a la Plaza de las Américas, ubicada en el extremo opuesto y comunicada por una calle peatonal, flanqueada por comercios, se encuentra la Legislatura inspirada en el Parlamento inglés, que alberga los recintos de las Cámaras de Diputados y Senadores del Gobierno Infantil de la República, conformado por alumnos de las escuelas locales.
Un gran espacio de juegos enfrenta al edificio del Palacio de Justicia con su sala de audiencia, despachos y en el subsuelo una pequeña cárcel.
Además cuenta con un estudio radiofónico "Radio República", la primera radio infantil del país, con salida a la galería que separa la plaza con el espacio circundante.

Fuera de este sector se ubican construcciones como el Estadio, la Casa del Niño, los edificios de la Marina, Ejército y Aeronáutica.

La República de los Niños, que a partir de 1979 pasa del ámbito provincial al municipal, es única en el mundo constituyendo un lugar infantil donde convive la formación ciudadana, las actividades recreativas, educativas, culturales, sociales, científicas y deportivas.
 

EL MUSEO DE LA PLATA

El Museo de La Plata es un museo de Ciencias Naturales y a diferencia de otros museos de este tipo, incluye Ciencias del Hombre como Arqueología, Antropología, Etnografía, etc.


Fuente:

Tomado del sitio: http://www.laplata.gov.ar/

  subir
 
© 2005 Copyright FolkloreTradiciones -  Todos los Derechos Reservados
Dean Funes 1773 - Piso 11 Depto. 25 Capital (1244)
- Provincia de Buenos Aires - República Argentina
Tel/Fax: (54-11) 3533-0893
- e-mail:
mlf@folkloretradiciones.com.ar
Diseño y Hosting: www.drwebsa.com.ar
 

courses: Master Sport e svago