El También el barrilete es uno de los juegos muy antiguos. Este juego se
atribuye al General Chino Han Sin, que lo inventó alrededor de 200 años antes de
Cristo, para dar aviso de la llegada de refuerzos a una plaza sitiada; y también
a Archytas de Tarento (440-360).
Es un juego universal y se lo puede denominar barrilete (hexágono), cometa,
volantín, birlocha, milocha, cambucha, papalote, papelote, pandorga (redondo y
muy grande), yuto (rombo), papagayos (en Venezuela), chingo o boquinete, chincha,
zamurita; y hasta sirvió para que Benjamín Franklin, quien había puesto una vara
de hierro en lugar de caña o madera, lo remontara en un día tormentoso, y
atrajera hacia sí varios rayos, lo que dio lugar a la invención del pararrayos.
En la actualidad se evita remontarlo en las ciudades por los problemas de
enredos con cables.
Tiene como característica que en muchos lugares lo jueguen tanto niños como
adultos, y se realicen certámenes en lugares abiertos tanto de remontar el
barrilete como del diseño con que se realiza.
En China es muy propio de los adultos hacer barriletes o cometas de diseño muy
elaborado, con formas de dragones, peces, pájaros, pueden estar realizadas con
papel de colores, papel de seda o con seda, y su armazón está elaborado con
cañas partidas verticalmente y convenientemente raspadas (6 u 8 cruzadas), se
atan allí tiros de hilo, y se le coloca una cola al barrilete, que sirve de
contrapeso y que muchas veces hay que aumentar o disminuir para que remonte
vuelo. En Venezuela el esqueleto se realizaba con varillas de verada, venas de
palma de coco.
En América Latina son más comunes las formas hexagonales, estrellas, o con forma
y color del equipo de fútbol preferido.
En las últimas épocas aparecen barriletes de plástico que se venden en
jugueterías.
Estas cometas inician su ascenso cuando (con viento) sube y se le va largando
hilo.
En Santiago de Chile, en 1796 se prohibió remontar cometas en el radio urbano, y
en México en 1797 se amenazaba con prisión a quien remontara papelotes en
azoteas y terrazas, por los problemas y accidentes que causaban, además de las
batallas de volantines que ocasionaban entre los competidores.
El noveno mes del calendario chino se dedicaba al volantín.
Fuente: http://www.educar.org/infantiles/Juegos/tradicionales/barrilete.asp